III


"Por qué fiar ya corazón, si es solo empeño
el dejarte como pago lo que pierda en adelante
que usurera condición con doble aval pagarte
con algo que al querer yo no soy dueño.

Mas, ya no dejo el corazón aun por amarte
no he de fiarme de un contrato tan pequeño

que se enuncia cual firmar con un "te quiero"
que bien pueden desdecirse de ambas partes.

Sabed que de amor fiar, por dar, fui ciego
y por mas que porfíes vos en cada instante
tengo el temor de verlo en duelo suplicante
por acabar, tu con él , servil, plebeyo.

Sabed que si lo queréis robar, voy vigilante
con una seguridad de duda de tu amor sincero
pues quizás aumente su valor tu "no tenerlo"
y al tenerlo bien ya sea este menguante
y al menguar tan solo quieras malvenderlo.

Apostad con solo el vuestro, si hay bastante
no me hagáis la vuestra apuesta con lo ajeno
dejad pues, si bien queréis, que sea el vuestro
pues con el mío yo no pruebo en tus azares
si van de ganar doble y al perder, lo puesto."

Rezgo Reis

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